Cuando en Julio de 1794, Napoleón Bonaparte tenía aproximadamente unos 25 años, estuvo desaparecido varios días, al regresar la única explicación que dio fue que había sido secuestrado por unos hombres extraños.Tiempo después, los científicos encontraron una especie de “MicroChip” en su cráneo.
Los científicos que han examinado de manera exhaustiva los restos de Napoleón Bonaparte, dijeron estar “profundamente sorprendidos” por el descubrimiento de un microchip de un centímetro de largo incrustado en su cráneo. El grupo de científicos afirmo que el misterioso objeto podría ser un implante extraterrestre, lo que sugiere que el francés fue secuestrado por un OVNI.
Hace unos años, el Dr.André Dubois, solicitó y se le fue otorgado el permiso para examinar el cráneo de Napoleón Bonaparte con el objetivo de descubrir algún problema médico que los llevara a entender mejor su pensamiento y comportamiento. El Dr. Dubois buscaba anomalías en sus glándulas cuando encontró una pequeña incisión en el hueso. Lo que encontró desafía a cualquier explicación lógica y científica.
"Las posibles consecuencias y efectos que pueda causar este descubrimiento son demasiado grandes de comprender” declaró el Dr. André Dubois, quien hizo la impactante revelación en una revista médica francesa en Septiembre del 2010.
El Dr. Dubois, hizo el sorprendente hallazgo al estudiar el esqueleto de Napoleón, bajo un presupuesto de aproximadamente 140.000$ dado por el gobierno francés.
“Yo esperaba determinar si sufrió de un trastorno de la hipófisis que explicara su pequeña estatura”, explicó, “el objeto era una especie de microchip súper-avanzado.”
Los investigadores sólo pudieron suponer la naturaleza y procedencia del objeto, porque es mucho más pequeño que cualquier dedo humano y no tiene componentes eléctricos o cableados. Los científicos también afirmaron que el cráneo de Napoleón creció alrededor del objeto misterioso, así que una cosa que los investigadores concluyeron, fue que probablemente dicho objeto fue insertado en su cabeza durante su juventud. (Asumieron que fue durante su estancia en Egipto).
El líder más poderoso de Francia nunca habló de esto con nadie y nunca se encontró una historia escrita de él que explicara este descubrimiento, por lo que los investigadores comenzaron a excavar profundamente entre los registros de sus viajes, con la esperanza de encontrar lugares, circunstancias o pistas, que dijeran que podría haber tenido un encuentro con extraterrestres.
Primero, hubo un levantamiento local en 1794, cuando un Napoleón de 25 años desapareció durante varios días y le dijo a todos al regresar que había sido secuestrado y aprisionado por “hombres extraños”. El microchip, si eso es lo que realmente es, podría haber sido instalado primero y posteriormente habría sido actualizado o reparado, o su cuerpo podría haber sido sólo un objeto de pruebas de compatibilidad en un primer momento.
Desde aquel misterioso encuentro, el ascenso de Napoleón fue totalmente maravilloso. El año siguiente, Napoleón había sido puesto a cargo del ejército francés en Italia. En 1804, después de una serie de victorias sorprendentes, el diminuto general se coronó emperador de Francia y su imperio se extendió, para incluir lo que actualmente conocemos como Alemania y Austria, y también Suiza, Italia y Dinamarca.
Napoleón utilizó estrategias militares, que estaban a más de un centenar de años por delante de su tiempo”, dijo el doctor Dubois. “Tal vez el implante de alguna manera mejoró por completo todas sus habilidades.”
En la mayoría de los casos de abducción extraterrestre las personas no son casos únicos y singulares, lo que significa que el sujeto es usualmente secuestrado y estudiado no sólo una vez, sino muchas veces, como por ejemplo, los expertos en vida silvestre hacen al colocar dispositivos de rastreo y registro en animales para la investigación. Se sabe que los OVNIs aparecen en las zonas de conflicto y momentos decisivos en la historia, algunos creen que fue elegido durante la rebelión de la época por fuerzas extraterrestre, pero no se sabe exactamente con que fines.
Las personas que tuvieron la dicha de conocer en vida a Bonaparte, solían afirmar que su presencia era tan poderosa que sentían que algo les impedía hacerle daño de alguna forma, incluso si no había nadie más presente en la habitación. Algunos lo describieron como un aura o una armadura invisible, pero ahora, muchísimos años más tarde, podemos creer que estos sentimientos eran causados por la energía generada por el misterioso microchip.