El programa Artemis con el que la NASA volverá a poner misiones tripuladas sobre la superficie lunar, y eventualmente en Marte, mostrará a la humanidad cosas nunca antes vistas, según dijo este sábado en entrevista con EFE el nuevo jefe de astronautas de la agencia espacial estadounidense, Joseph Acabá.
"Este es un gran momento en la Historia, con el
programa Artemis vamos hacer cosas que nunca se han hecho", dijo Acabá,
que con su nombramiento dado a conocer el pasado 2 de febrero se convirtió en
la primera persona de origen hispano en dirigir la Oficina de Astronautas del
Centro Espacial Johnson en Houston (Texas).
Como responsable de gestionar los recursos y las
operaciones de los astronautas, que actualmente suman unos 40, Acabá
supervisará la selección de las tripulaciones de las próximas misiones Artemis,
luego de que la primera de ellas regresara a la Tierra en diciembre pasado
después de una misión de 25 días en la que orbitó la Luna.
La Artemis 1 viajó sin astronautas, pero la Artemis 2,
prevista para el año 2024, será la primera misión tripulada de este programa y,
como señaló Acabá, la NASA espera poder dar a conocer a los tres integrantes
estadounidenses (el cuarto tripulante será de la agencia espacial canadiense)
en el transcurso de los próximos dos meses.
"Aquellos que elijamos sabemos que harán un gran
trabajo, no solo en la misión sino representando a los astronautas y a
EEUU", aseveró Acabá, geólogo de profesión y que acumuló 306 días en el
espacio desde que fue seleccionado por la NASA en 2004.
De cara a la Artemis 3, la primera que pondrá astronautas
sobre la superficie lunar desde el fin del programa Apolo en 1972, la agencia
espacial estadounidense busca conformar una tripulación diversa que incluya a
la primera mujer y la primera persona de color que lleguen a la Luna.
El veterano astronauta, nacido en California en 1967 y de
origen puertorriqueño, es consciente de la fascinación que suscitan los vuelos
espaciales, que llevan a los estudiantes a "soñar en grande", y, en
ese sentido, está convencido de que el deslumbramiento será mayor con las
próximas misiones de Artemis, que "serán más grandes que cualquier otra
cosa que hayamos visto antes".
"En lo personal, mi interés en el espacio empezó
viendo las misiones Apolo con mis abuelos, y espero que cuando los jóvenes
estudiantes vean las misiones Artemis les despierte su imaginación",
confesó Acabá, quien agregó que "la inspiración es otra gran parte de una
misión".
La actual efervescencia que vive la industria
aeroespacial se ha nutrido sin duda de los vuelos operados por empresas
privadas, con SpaceX como actor protagonista gracias al contrato que tiene con
la NASA para el envío de misiones a la Estación Espacial Internacional (EEI),
un sector que se prevé aumente con la entrada de nuevas firmas como Boeing.
Ayudar en esta suerte de "comercialización del
espacio" es una de las responsabilidades de la NASA, como dijo Acabá, y
aunque ahora son unos pocos los seleccionados por la agencia espacial para
proyectos en conjunto "la meta es hacer el espacio accesible para
todos".
El astronauta, que en su nueva posición en la agencia
espacial estadounidense reemplaza a Drew Feustel, quien ha sido jefe interino
de la oficina desde que Reid Wiseman dejó el puesto a finales de 2022, no duda
en afirmar que estar en el espacio ha sido una de las más grandes experiencias
de su vida.
Durante su tiempo como astronauta Acabá realizó tres
misiones espaciales, la primera de las cuales, la STS-119, fue en 2009 y a
bordo del transbordador Discovery, con la que entregó a la EEI el cuarto par de
alas de paneles solares y luego, una vez en el laboratorio orbital, realizó dos
caminatas espaciales.
Sus dos siguientes misiones, en 2012 y 2018, fueron como
ingeniero de vuelo a bordo de las naves espaciales rusas Soyuz para las
expediciones 31/32 y 53/54 de la estación espacial.
Desde entonces este licenciado en Geología por la
Universidad de California en Santa Bárbara ha prestado apoyo a la oficina de
astronautas en diversas funciones, entre ellas la de director de operaciones en
Rusia y jefe de la Oficina de Pruebas de Integración de Vehículos.
Señala que un requisito importante para ser astronauta es
contar con una licenciatura en educación superior, la cual puede ser de un
amplio espectro.
"Buscamos gente que sea capaz de trabajar en
equipo", aseguró. EFE