En febrero de 2013, la estudiante universitaria canadiense Elisa Lam desapareció misteriosamente en Los Ángeles, EE.UU. dejando interrogantes sin resolver hasta el día de hoy. Su última aparición fue captada por las cámaras de seguridad del Hotel Cecil, mostrándola en el ascensor en un comportamiento inusual, hablando consigo misma, realizando movimientos extraños y aparentemente escondiéndose de alguien.
En medio de la búsqueda de Lam, los huéspedes del hotel comenzaron a reportar problemas con la presión del agua, y algunos incluso afirmaron que el agua tenía un color oscuro y un sabor extraño.
Fue 19 días después de su desaparición cuando Santiago López, un empleado de mantenimiento del hotel, hizo el descubrimiento macabro: el cuerpo de Lam fue encontrado desnudo en uno de los tanques de agua de 3.785 litros situados en techo del edificio, los cuales abastecían a las habitaciones, la cocina y una cafetería. Este hallazgo solo profundizó el misterio en torno a su desaparición y muerte.
A pesar de que la causa de su muerte fue determinada como ahogamiento accidental, aún persisten interrogantes respecto a cómo pudo acceder al tanque de agua del hotel, dado que las vías de acceso al techo estaban cerradas con llave y se cuestiona la posibilidad de que haya ingresado por sus propios medios debido al peso de las tapas y la ausencia de una entrada clara.
El informe forense ha sido objeto de críticas debido a inconsistencias y ambigüedades. Se han señalado cambios en la clasificación de la muerte, así como la ausencia de pruebas toxicológicas y de abuso sexual, lo que ha generado incertidumbre en torno a los eventos que llevaron a su trágico desenlace.
Además, la desaparición del teléfono de Elisa sigue siendo un misterio, ya que no se encontró ni en el tanque ni entre sus pertenencias en el hotel. Sin embargo, su blog de Tumblr fue actualizado en varias ocasiones después de su fallecimiento, añadiendo más incógnitas a este enigma.